Niño amable de mi vida,
consuelo de los cristianos,
la gracia que necesito,
pongo en tus benditas manos.
Padre Nuestro …
Tú que sabes mis pesares,
pues todos te los confío,
da la paz a los turbados,
y alivio al corazón mío.
Dios te salve María …
Y aunque tu amor no merezco,
no recurriré en vano,
pues eres Hijo de Dios,
y auxilio de los cristianos.
Gloria al Padre ...
Acuérdate oh Niño Santo,
que jamás se oyó decir,
que alguno te haya implorado,
sin tu auxilio recibir.
por eso con fe y confianza,
humilde y arrepentido,
lleno de amor y esperanza,
este favor yo te pido.
Pedir la gracia que desea
y decir siete veces:
DIVINO NIÑO JESÚS, EN TI CONFÍO